Goodyear presenta algunos consejos que se deben tener en cuenta para aumentar la protección de sus conductores y cargas
Existen cuidados básicos que muchas personas conocen tales como la supervisión de la presión, alineación, revisión del neumático o la rotación de las llantas, pero también hay otros que los conductores desconocen y, al no vigilarlos, pueden convertirse en un riesgo para la seguridad de los vehículos aumentando las probabilidades de un accidente.
Una vieja práctica
‘Purga’ es un término muy conocido entre conductores y transportadores, el cual NO es recomendable, hace referencia a la práctica de sacarle aire a la llanta en una parada de descanso cuando se está realizando un viaje largo, es decir, hacerla con las llantas en caliente. Aunque esto ya no es tan común, todavía hay personas que lo realizan.
La velocidad y flexión de las llantas de manera constante generan calor y aumentan la presión de las mismas, cuando estas se enfrían se retoma su presión normal, pero si se ha sacado aire en caliente quedará en un nivel más bajo del aconsejable. Esto afecta directamente la durabilidad y rendimiento de la llanta.
Geometría vehicular
Cuando de seguridad se trata, la verificación de los parámetros geométricos debe ser una acción prioritaria, pues evita el desgaste excesivo de las llantas, mantiene el vehículo andando en línea recta, facilita las maniobras de conducción (esencial para esquivar una colisión) e impide el deterioro de la suspensión porque minimiza los esfuerzos que inciden sobre el sistema. Es importante destacar que tener los camiones alienados ayuda a no tener gastos inesperados de mantenimiento.
Dimensiones en rin
Si usted hace el montaje de sus llantas nuevas en un rin que no se ajusta a las medidas correctas, le generará bastantes inconvenientes como fatiga prematura, deformación de las pestañas, pérdida de la integridad de la carcasa para futuros reencauches y en el caso de la ‘llanta sin cámara’, pérdida de aire.
En este caso lo que debe hacer antes de adquirir las llantas o rines nuevos, es asegurarse que el producto sea compatible en cuanto a dimensiones de ancho, largo y radio, los cuales se encuentran especificados en manuales de entidades normalizadoras como la Asociación Latinoamérica de Llantas y Rines (ALAPA).
De alto peligro
El caster es la inclinación del pin maestro hacia el frente o hacia atrás, en el sentido longitudinal del vehículo. Cuando se desajusta puede provocar que la dirección del vehículo empiece a inclinarse para un lado, pero aún más grave, genera inestabilidad y deficiencia de frenado, lo que aumenta las probabilidades de sufrir un accidente. Otra consecuencia riesgosa es que las llantas presentan vibraciones que dificultan la conducción normal del automotor.
Sin neumático
Una de las tendencias que ha presentado el sector de transporte de carga y pasajeros es la utilización de llantas radiales o ‘sin neumático’, la cual tiene internamente una capa de caucho especial más gruesa, que tiene como objetivo principal evitar la pérdida de presión en el inflado. Lo bueno de este producto es que permite un montaje y desmontaje simplificado y seguro, aumento de la carga útil y menor temperatura de trabajo, entre otros, por eso se recomienda su uso. Goodyear destaca la línea KMax.
Vigile el labrado
El labrado brinda a los vehículos la tracción, control direccional, drenaje y reducción de la temperatura de trabajo de la llanta, por eso su control debe ser periódico, dada la importancia que implican estas características.
Cuando la profundidad del labrado alcanza el 1.6 milímetros (máximo permitido por la ley) las franjas transversales se vuelven visibles y así se indica que la llanta debe ser reemplazada.